Salmoneras: «Nosotros estamos acá para decir que no, para que se mantenga una Ley firme como la que está»
Escrito por fmnv el 5 julio, 2024
Recordemos que después de mucho debate social y resistencia por parte de la comunidad fueguina, en 2021 la Legislatura de la provincia prohibió la instalación de Salmoneras, entendiendo que las mismas tienen un impacto negativo en el ambiente.
“Este hombre practica nuevamente esta lógica del capitalismo, que actualmente tanto daño nos hace, y está comprobado que este sistema nos está llevando a un mal vivir» planteó García, aseverando que el empresario plantea la degradación del medio ambiente en pos de una tasa de ganancia y no de generar puestos de trabajo con sustentabilidad.
Es importante recordar que durante el gobierno de Macri se votó una Ley de Acuicultura, a raíz de eso el gobierno de Noruega junto con el gobierno de Rosana Bertone quisieron generar una ley para instalar las salmoneras en nuestra provincia.
La propuesta consistía en la instalación de jaulas para salmónidos en el Lago Khami, para luego trasladarlos al mar para que terminen de desarrollarse.
Federico vinculó este punto con el proyecto de la Ruta costera, entendiendo que dicho proyecto también estaba motivado por inversiones provenientes de grandes monopolios y agregó que “el circuito económico lo cerraba todo, les cerraba para los empresarios (…) sólo para tener ganancia”.
Con respecto a la intervención de Greenpeace, el entrevistado explicó que cuando la lucha es contra un gobierno o contra grandes empresas, ellos intervienen para acompañar la lucha de los habitantes que son oriundos “Sin Greenpeace detrás era muy difícil” amplificando las voces y facilitando estudios concretos del impacto que han tenido estos proyectos en otros países como, en este caso haciendo referencia a Chile.
A partir de la década del 80 en Chile, en un intento de apalear la crisis económica, ha crecido la industria de la Acuicultura de la mano de las salmoneras, esta actividad productiva se desarrolla en jaulas que se ubican en el mar austral del pacífico, las mismas tienen la dimensiones de una cancha de fútbol, se instalan los alevines de los salmónidos, cientos de peces, que necesitan de aguas prístina, es decir que no estén contaminadas. Nuestras aguas cumplen con las características que precisa dicha industria para desarrollarse, por eso el canal de Beagle y el mar que nos rodea en nuestra provincia son codiciados por el gobierno Noruego. Para alimentar a estos cardúmenes de peces se arrojan bolsones de harina al mar, que muchas veces finalizan en el lecho marino junto a las eses y los antibióticos que reciben con el fin de evitar las infecciones en los animales debido a las condiciones de hacinamiento en las que se desarrollan. Todo este residuo genera desiertos, modificando el ecosistema marino, matando gran parte de la fauna marina o impulsando la migración en busca de alimento. Ello también impulsa a las empresas a moverse por el mar porque el ecosistema se va dañando, la industria salmonera genera un “ecosistema industrial” que no tiene un impacto favorable en los habitantes, en el caso de Chile, las ganancias para los pescadores no fueron sustanciales y se vieron obligados a abandonar la actividad pesquera. El País limítrofe admite tener muchos costos ambientales: seguros de desempleo, mala calidad de salud en sus poblaciones, desastres naturales, inversiones marítimas que tiene que financiar el estado para quienes se dedican a esta actividad.
A esto hay que sumarle el impacto que tiene la introducción de especies exóticas como el salmón, los escapes de estos animales con antibióticos y la contaminación que eso produce, la depredación por parte del Salmón de otras especies marinas, las jaulas que deben ser descartadas luego de 8 años, dejando un espacio que difícilmente puede regenerarse. Las aguas de Tierra del Fuego concentran un 50% de los bosques macroalgas en nuestro país, es uno de los principales sumideros de carbono del planeta y el hogar de gran cantidad de fauna asociada.
Entonces, los interrogantes que plantea Federico García son “¿por qué vamos a afectar esa vida marina, para que Cherñajovsky se lleve unos dólares? ¿Cuántos puestos genuinos de laburo genera?”.
Es importante analizar el impacto en la población, traducido en puestos de trabajo. Nada garantiza que la empresa brinde trabajo y condiciones dignas para sus empleados de forma prolongada en el tiempo, el entrevistado agregó que la experiencia en otros lugares demuestran que el impacto no es favorable para la población cercana a este desarrollo industrial “veamos también qué puestos de laburo generamos, qué condiciones de laburo y para quiénes”.
En el caso de Almanza, un espacio de nuestra provincia donde se viene desarrollando y proyectando un Polo turístico y gastronómico, con alimentos frescos que extraen de la pesca artesanal que realizan en la zona. Para esta comunidad pujante claramente sería nocivo la instalación de una empresa con la envergadura de NEWSAN.
Para finalizar, García hizo hincapié en que existe un acuerdo resguardado por la Constitución Nacional y establece que no puede haber regresión ambiental, volver a darle tratamiento a esta Ley en la legislatura iría en desmedro del cuidado del ambiente, el integrante de la comunidad costera reafirmó “nosotros estamos acá para decir que no, para que se mantenga una Ley firme como la que está, porque todo esto afecta a la población, es un derecho humano de lo que estamos hablando (…) Estamos hablando de nosotros los seres humanos que ya habitamos este suelo”.